7.7.11

A veces, las oportunidades no están de más.

El DJ pincha algo de Pitbull, todo el mundo se sabe la canción. Baila, salta y corea la letra. A pesar de que todos lo hacen a la vez, no se entiende nada. El ruido es escandaloso, pero da lo mismo. La gente suda, y el sitio huele. Pero también da lo mismo. Lo que realmente tienen en común es que se divierten. Es una noche de fiesta y todos lo han pillado a la primera. No conoces a casi nadie, pero bailas con quién sea. Estás feliz. Te has propuesto pasartelo bien esta noche, y estás dispuesta a cumplirlo. Te da igual qué suene o dónde estés, lo único que haces es disfrutar. Un chico se acerca, no es demasiado guapo. Pero eh, también es una noche de oportunidades. Le dejas bailar junto a ti. No tarda en convertir su sonrisa en algo precioso y su voz en algo sexy. Acabas viendo atractiva incluso su nariz y morirías por la dulzura de sus ojos. Su nombre lo has aprendido con más facilidad de la que acostumbras, pero allí no podéis seguir conociendoos. Te invita a algo, salís de allí. Camináis tranquilos y como si no hubieras bebido todo lo que realmente has bebido. Te encuentras lúcida y fresca, pero hace calor. Él te lleva a la playa y os contáis todo tipo de cosas con los zapatos en la mano bordeando la orilla. Sus palabras fluyen y te son tan fáciles de escuchar que te crean una extraña sensación de comodidad y seguridad. Comienzas a inquietarte, quizá por la lentitud de la situación. Ya no estás tan lúcida, pero él lo soluciona sujetándote la mano. Tu cerebro, de repente, vuelve a funcionar. Fresca de nuevo. Pero no te apetece caminar a la luz de la luna. Quieres divertirte, es una noche de disfrutar. Quieres reír. Quieres gritar, quieres hacer locuras. Lo empujas y cae desequilibrado a la arena húmeda. El agua llega hasta él y lo moja antes de que pueda, al menos, reaccionar. Tú lo contemplas risueña. A él se le borra la sonrisa, y te mira prácticamente enfurecido.
- ¿Por lo menos me ayudas a levantarme, no? -te tiende la mano.
Se la das, y cuando comienzas a tirar de él, él es más rápido y te provoca la caída sobre él. Estáis cerca, pero no estáis a lo que estáis. Os reís y ambos podéis adivinar qué ha bebido el otro por vuestros alientos. Él echa la mirada atrás, una ola se avecina y tú no tienes tiempo de hacer nada. Te salpica y moja toda tu ropa. Ya no te hace tanta gracia, pero a él le divierte más que a ti antes. Se deshace de ti y se levanta. Camina alejándose de ti, metiéndose en el agua. Te dice que estás mojada, que se te está empezando a transparentar todo y te invita a acompañarle.
- Sólo un poco -le dices.
Y le sigues. Él te espera con la mano preparada para que tú la tomes. El agua os llega a la cintura, y la ropa os pesa cada vez más, pero te da más igual todavía que la música que sonara horas antes. Quieres disfrutar. Él te atrae hacia sí entre risas y cuando volvéis a estar de nuevo tan cerca como para notar la respiración del otro, tú miras en su interior, adivinando que él será lo mejor que te vas a llevar de estas vacaciones. Te besa, le besas. Acaricias su rostro, él enreda sus dedos en tu pelo. El chico no demasiado guapo. El chico cuyo nombre aprendiste con facilidad. El chico al que tuviste que darle una oportunidad resultó que tenía los mejores labios que habías probado, los modales de un caballero, el poder para hacerte reír de cualquier buen humorista y ese ingrediente especial que hizo que, a pesar de no volver a verle jamás, siempre lo recordaras.

5 comentarios:

  1. ¡Qué idea más original para meterte de lleno en la historia! Pocas veces he visto a gente que escriba haciendo que el lector sea el protagonista de la historia, pero sin duda, me quedo con el párrafo final. El toque final del texto es magnífico.
    Gracias por seguirme, y por dejarme tan bonito comentario en el blog. Un beso, te deseo lo mejor en este pequeño-gran mundo de la literatura.
    http://acrosseternity.blogspot.com

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  2. Me encanta la entrada y es que no solo eso es la más bonita que he leído.Escribes de maravilla.Te sigo.Gracias por pasarte por mi blog.Te espero pronto en http://karenpaolarm.blogspot.com/

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  3. Me encanta la entrada, es una maravilla. En serio, aqui tienes una seguidora mas!

    Pasate por mi blog, escribo una novela que se titula "Lluvia de Noviembre" espero que la leas y me des tu opinion.

    Un beso.

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  4. Alucinante. Creo que esa es la forma más rápida de expresar todo lo que esta historia me ha echo sentir y recordar. Me recuerda a mí el verano pasado, algo parecido quizás.

    Me ha encantado, mis felicitaciones, ya creía que tus entradas eran buenas pero esta ha superado los límites.

    Por cierto, a mi también me encanta el cambio que pega Damon en la serie, pero no me cambia mi pensamiento por Stefan jajaja Eso sí, Ian como actor tampoco es poca cosa, que con él también me conformo.

    Y... gracias por tu reflexión/consejo sobre el miedo a los sentimientos. Me ha servido bastante la verdad.

    1 besito :)

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  5. oh cielo, me encantó como lo has descrito! enserio me encantó, no puedes ni siquiera imaginar que he pensado cuando iba leyendo cada uno de tus renglones o quizá si, pero enserio me gustó, me adentre a la historia y fue especial:D

    " El chico cuyo nombre aprendiste con facilidad. El chico al que tuviste que darle una oportunidad resultó que tenía los mejores labios que habías probado, los modales de un caballero, el poder para hacerte reír de cualquier buen humorista y ese ingrediente especial que hizo que, a pesar de no volver a verle jamás, siempre lo recordaras." ME FASCINO!

    muchas felicidades.

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