1.9.13

Con acento francés - IV.


Apenas se escuchaba el sonido de sus pisadas, el sonido de un ligero tacón desplazarse por las galerías que durante el día habían albergado tantas miradas curiosas y a la vez vacías, miradas que buscaban algo que en realidad no encontraban, y palabras que se esfumaban tan pronto como eran pronunciadas. Pero ahora reinaba el silencio, y tan sólo sus pasos y su respiración envolvían aquel lugar en una leve atmósfera que la hacían flotar. O quizá no fuera ese silencio aparente, quizá fuera que, aunque parecía no existir, volvía a sonar aquel piano en sus oídos, entonado por la quietud de las estatuas que la observaban con ojos opacos, entonado por la ligereza de unos movimientos congelados en el tiempo, atrapados en la eternidad. Y aquel piano sonaba ahora mucho más alto de lo que jamás imaginaba.

Apenas se escuchaban sus pasos y su respiración, sí. Pero ella tan sólo percibía la belleza que parecía querer acabar con ella. Se movía emocionada, como en un sueño, por toda la galería, casi quería correr bajo las bóvedas de cañón que tanta historia albergaban, serpenteando entre una Venus de Milo mutilada, parándose a observar a un niño que juega con una oca... Sólo podía estar soñando. Durante una noche estrellada, mientras afuera los copos de nieve se posan en las calles, mientras dentro sólo parece existir ella y todas aquellas obras que siempre ha soñado poder contemplar en la paz que ese superávit de personas le arrebataba, esa paz cuya ilusión sólo conocía a través del aislamiento que aquel piano entonado por las galerías le proporcionaba, y cuya verdadera esencia había podido conocer tan sólo gracias a él, a ese misterioso hombre francés, con el que apenas había cruzado palabras, el que permanecía sin nombre, el que la seguía cauteloso por todas las salas en las que las numerosas obras se acumulaban tan sólo con el objetivo de ser expuestas a unos ojos que no comprenden cuánto puede significar el arte para algunas personas.

Se detuvo frente a la imagen de una mujer semidesnuda cuya mano alzaba al cielo, envolviendo con sus dedos el mástil de la bandera francesa y volviendo la mirada a sus espaldas, observando a todo un pueblo ansioso de libertad. Dejó escapar un profundo suspiro, a la vez que el ligero piano cada vez se hacía más imperceptible, y tan pronto como aquel misterioso hombre se situó junto a ella, se convirtió en un sonido de segundo plano, un sonido que mucho tenía que envidiar a cualquiera de las palabras que él pudiera pronunciar.

"¿Quién eres?", dijo ella, mucho más segura de sus palabras que minutos antes, pero sin ni siquiera dedicarle una mirada que no iba a ser devuelta. Así que clavando ambos sus miradas en aquella mujer cuyo pecho descubierto se había convertido en todo un símbolo del progreso, él se decidió a responder con otra cuestión.
"Buena pregunta. Dime, ¿quién era ella?"

Y ahí terminó la conversación, sin entender jamás qué fue lo que él quiso decir respondiendo con aquel nuevo interrogante que se añadía a la infinita lista de misterios que aquel día estaba atesorando para ella, que se veía incapaz de intentar adivinar a qué le llevaría todo aquello. Otro suspiro devolvió el sonido de las teclas del piano a sus oídos, acompañando la visión de ella, de la Libertad guiando al pueblo.

"Sígueme, quiero enseñarte algo antes de que se nos acabe el tiempo".


10 comentarios:

  1. ¿Se puede ser capaz de escribirte un comentario, con las manos arriba alabándote y a la vez la boca abierta en signo de WTF WHY YOU WRITE SO SO SOOO GOOD?
    En fin, me ha encantado, y que allá más partes como usted quiera, porque de verdad, que quiero saberlo todo, hasta el más mínimo detalle.

    Cuando creo que estoy apunto de descubrir quién es ese hombre, cambias el rumbo y eso me pone muy nerviosa y a la vez me encanta.

    Dios, sigue así, por favor.

    Te admiro muchísimo Yaiz.

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  2. Lloro. La próxima vez seré la primera Yai, I promise.
    Me encanta leer esta clase de cosas, cuando mezclas tu pasión por el arte con la de escribir. Y encuentro cierto parecido entre la chica de esta historia y tú.
    Sé que hasta el último momento no descubriremos quien es ese misterioso chico, pero tengo unas ganas terribles de que vuelvas a publicar.
    No te puedes imaginar lo jodidamente bien que escribes, en serio.
    Te admira,
    Lau.

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  3. ¡Me vuelvo locaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! Siempre me dejas igual.
    Me ha fascinado el detalle del piano y la Libertad guiando el pueblo. De veras, le ha dado un toque único al relato.
    ¡¡¿"Antes de que se nos acabe el tiempo"?!! QUIERO LEER MÁS.
    Escribe, tanto como quieras porque no me cansaré de leerte. Y de saber más de ella. Y de él. Y de ambos.

    Un abrazo muuuuuy fuerte y con mucho amor,
    Luz.

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  4. Arghhhhhh quiero saber que pasa, con cada parte me dejas con unas ganas de más, ay Yaiza que bien que escribes :) Espero la continuación que me has dejado con una intriga impresionante.
    Un besito, nos leemos.
    http://theworldofthelettersanddreams.blogspot.com

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  5. Guau, BEAUTIFUL! Me encanta, me encanta cómo manipulas la historia de tal manera que cuando todos creemos que vamos a descubrir algo, cambias completamente el rumbo de la historia y nos vuelves a dejar con ese misterio y esas ganas de seguir leyendo. Quiero saber más, ya me he sumergido totalmente en este mundo de acento francés tan hermoso y no quiero salir hasta descubrir qué esconde el chico y qué pasará entre los dos. En cuanto esté la continuación, ten por seguro que pasaré por aquí a ver qué es eso que el misterioso chico quiere enseñarle antes de que se les acabe el tiempo. Muchas gracias, de nuevo, por dejarme entrar a tu blog y leer estas bellísimas palabras repletas de talento.

    Un abrazo <3

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  6. YAIZAAAAAAAAAAAA. JOPETAS. Cómo te gusta verme sufrir. ¡Qué misterio, por favor, qué misterio!
    Me ha encantado toda la narración, sobre todo el detalle del piano y del cuadro de la Libertad guiando al pueblo, cada palabra está perfecta donde está. La intriga me está matando, pensaba que en esta entrada por fin revelarías algo sobre el hombre misterioso, y nada más lejos, has creado todavía más interrogantes e intriga. Eres impredecible. Y me gusta.

    Se sorprende día a día de lo buena escritora que eres,

    Daw

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  7. Recreas muy bien la escena, vaya yo me he podido transportar hasta ella perfectamente.
    Creo que ahora mismo me leeré las primeras partes para poder enterarme de qué va. Primero porque ya el simple titulo me ha llamado la intención y segundo porque me gustaría saber como sigue.
    Un beso enorme!
    Aquí tienes una seguidora.

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  8. ¿Lo han dicho todo ya?
    No. O sí, pero ahora lo digo a mi manera.
    En estas entradas mezclas tu propia arte con el arte histórico. El un poco de amor, o intriga o noséqué le echas. Pero enganchas.
    Haces sentir hasta el sonido sordo de sus tacones o el frío que baña el aire por culpa de tanto mármol, tanto cristal y tanta obra de arte. Nos dejas con ganas de más. (Ya ves.)
    Y por supuesto, espero una siguiente parte, aunque sé que tú nos dejarás con l aboca abierta y ganas de más incluso en la última y definitiva parte.
    Te alabo de rodillas y cara a cualquier dios, el que prefieras,
    S.

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  9. ASDFGHJK. Yaiza, que te digo, si siempre me repito. Tienes un arte, un algo muy especial en tu forma de escribir que me encanta, que adoro, que todo. No sé, nunca dejas de sorprenderme y es como si en cada entrada mejorases más y más, por que cada vez me gusta más lo que leo. Es una pasada, tengo ganas de seguir leyendo lo que pasa. Así que venga, publica pronto <3

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