23.8.13

Con acento francés - III.


El tacto de su mano fría y suave como el mármol pulido la mantuvo lo suficiente distraída todo el camino, sin darle la oportunidad a pensar ni siquiera un instante en lo que estaba por venir. El misterioso desconocido, todavía sin nombre y apenas rostro, sólo acento, la arrastró a trompicones por un camino que ya había recorrido suficientes veces como para reconocerlo. Pero no lo hizo. No lo hizo porque seguía ensimismada con él, embriagada por su entusiasmo y su ímpetu, ebria de todas esas hermosas palabras perfectamente combinadas que sus labios -quién sabe si parisinos- pronunciaron.

Tal era su ausencia mental que, para cuando quiso darse cuenta, se encontraba cruzando el umbral de la locura bohemia y jovial en la que aquel joven parecía querer sumergirla. Cruzaba el umbral, sí, y se sumió en una profunda oscuridad que la dejó desorientada. Su piel fría y pulida, de pronto, se desvaneció, y se le vino a la mente aquel mito sobre una Eurídice escurridiza, tan escurridiza como él, que parecía huir ahora de sus sueños, corroborando que todo aquello no había sido más que una mera fantasía, una alucinación provocada por la desesperación que el exceso de pura belleza ante sus ojos había producido en aquel mismo momento en el que todo comenzó, frente a la Victoria de Samotracia.

Pero todo seguía oscuro y no despertaba. Se sintió perdida y quiso salir corriendo. Desorientada, ahogó un aullido de temor en su garganta, como si, al mismo tiempo, no quisiera despertarse a sí misma, con la esperanza de poder pasar todavía algo más de tiempo con el misterioso tipo de las manos esculpidas y el acento francés.

Repentinamente, un estallido de luz contrajo sus pupilas hasta el dolor, una sacudida final para el sueño. Pero cuando la breve ceguera cesó, se sorprendió en el lugar que menos esperaba. Volvió a ahogar un pequeño grito, mezclando la sorpresa, el horror e incluso el pánico, y, ¿por qué no?, también la angustia. Alzó la mirada para confirmar su paradero, y deslizando sus ojos color café por cada moldura, cada pilar y cada columna, cada detalle ornamental, acabó topando al fin con aquella figura etérea que parece existir sólo para el arte.

"¿Cómo lo has hecho? ¿Cómo...? ¡No podemos estar aquí! ¡¿Qué demonios hemos hech...?!", de repente, sus labios fueron presionados por su dedo de piedra pulida, un dedo que bien podría haber señalado a los cielos en cualquier escultura, haciendo referencia a cualquier divinidad griega, o apuntando a unas tropas al extremo de un emperador romano.

Su acercamiento rápido y brusco desde el otro extremo de la estancia, la dejó helada por su irrealismo, o quizá porque estaba demasiado emocionada para decir nada, o quizá porque...

"Sh, no digas absolutamente nada", susurró, rodeando su cintura con un brazo y todavía con su dedo sobre unos labios rosados y cortados por el frío del exterior, evitando así que se hiciera presa del pánico y saliera corriendo.

Y mientras la presión de su índice aminoraba, también le daba un poco más de libertad a todos sus movimientos, hasta liberarla por completo de sus brazos y convertirla en la escultura exenta más perfecta de todas las que jamás haya visto. Una escultura grácil y expresiva que aún sin palabras transmitía esa profunda admiración por todo lo que le rodeaba.



Como bien sabéis, Sab y yo todavía estamos empezando aquí, y nos falta un empujoncito.
Algo de promoción, compartir el enlace y dadnos una oportunidad, dejaros caer a descubrir qué os deparan nuestros personajes. Será un placer recibiros mucho más amablemente de lo que Violet acostumbra a tratar con cualquiera.

11 comentarios:

  1. YAIZA!! Aquí estoy!! Jope me he tenido que leer las entradas anteriores a esta para cogerle sentido a todo!! Enseguida voy a poner un tuit de la historia porque me ha encantado, y no lo digo por decir eh? Pues yo voy a ahcer medicina aquí en Zaragoza :) Un Un beso enorrrrrme!

    ResponderEliminar
  2. ESTOY EN SHOCK.

    Con lo bonito que era todo y ahora me dejas tan intrigada... Entre su procedencia y sus intenciones, me tienes loca. Me encanta como utilizas el arte para expresarte, de veras. Se nota mucho que te apasiona de un modo muy fuerte, y me encanta que seas así de... Artística. De veras. Porque esto es arte. ¿Quién demonios es ese chico? Apffff.

    Quiero la cuarta parte YA. Sin presiones, ¿eh?
    Espero que me entiendas, jajajajajajajaja.

    Con mucho amor,
    Lutz.

    ResponderEliminar
  3. Wow. Eres la Yaiza que empecé a leer hace meses, pero con un nivel mucho más alto.
    Con un capacidad de hacernos sentir ahí, dentro del oxígeno que escribes, que asusta.
    Sentir el frío del mármol por toda la espalda. Y ay.
    Que arte tienes con las palabras y qué bien queda tanta cultura junta entre tus líneas.
    Te admira hasta lo más alto de lo que pueda señalar cualquier dedo índice de cualquier escultura,
    S.

    ResponderEliminar
  4. Esta historia me tiene enamorada y enganchada! Me entra una intriga de ver lo próximo que pasa. Ya te lo he dicho anteriormente me encanta como escribes, logras transmitir las emociones perfectamente y de esta historia me gusta especialmente la mención a los monumentos históricos y la ambientación en París, espero pronto la continuación.
    Como te dije por Twitter realmente espero que tengamos alguna clase juntas, estaría genial conocerte :)
    Un besito enorme, nos leemos.
    http://theworldofthelettersanddreams.blogspot.com

    ResponderEliminar
  5. Me he puesto al tanto de la historia y la verdad es que me ha gustado *.*
    Por favor, avísame cuando continúes! (lo necesito para dormir bien, va en serio) jajaja.
    En fin, tengo una pregunta que hacerte, Yaiza.
    (Lo primero, siento haber desaparecido de tu blog pero he estado con un proyecto entre manos y no he tenido tiempo de hacer nada)
    He visto por otro blog o twitter (no lo recuerdo) que vas a estudiar comunicaciones audiovisuales y periodismo ¿Lo vas a hacer en la misma carrera? *.* Lo pregunto porque a mí también me atraen las dos y no puedo decidirme.
    Besos♥

    ResponderEliminar
  6. YAIZAAAAAAAAAAAAAAA.
    En cuanto leas esto, ponte a escribir la cuarta parte.
    Es que... ¿Quién es ese chico? ¿Qué hace ahí? ¿Cómo lo ha hecho? ¿Qué va a pasar entre ellos?
    Tengo tantas preguntas que jo... Necesito la siguiente parte.
    Qué arte tienes mezclando tu amor por el arte con tu amor por escribir.
    Me encanta.
    Sigue así.
    Te quiere,
    Lau.

    ResponderEliminar
  7. Yai, qué preciosidad de historia, por favor.
    Echaba muchísimo de menos pasarme por tu blog, en realidad echaba de menos todo esto del internet. Pero tranquila, que ya he vuelto.
    En toda la historia muestras tu pasión por el arte y es algo que me encanta porque das a ver una pequeña parte de ti. Además...cielo, cómo está narrada, qué perfección. Te admiro muy mucho, a ti y a tu capacidad para crear tal maravilla de textos.
    Espero volver a leerte pronto, cielo.
    Te admira y te quiere,
    Ana.

    ResponderEliminar
  8. Yaiza, estoy locamente enamorada de tus palabras ¿Te lo he dicho alguna vez? ¿sí? Pues te lo vuelvo a decir.
    En numerosas ocasiones te he dicho la increíble facilidad y precisión que tienes para relacionar temas. Pero es que este.. puf.. con el arte.. con tooodo.. es tan.. puf.
    Además como te conozco sé tu gusto por ambas cosas, y me gusta que las relaciones entre sí y podamos llegar todos a sentirlas.

    Sigue con esta historia, necesitamos conocer a este enigmático chico.

    Te admiro,
    Siempre,
    Mir.

    ResponderEliminar
  9. Esto quiere decir que...va a haber cuarta parte, ¡VA A HABER CUARTA PARTE! Ais, que me da.
    Creo que ya sabes lo que opino de esta historia, que me encanta como vas contando escenas muy cortas con todo detalle, haciéndolas mágicas. Que me encanta la pasión por el arte que nos transmites a todos cuando hablas de él, y me encanta ese chico de acento francés. Pero hay una cosa no me gusta tanto: el misterio me está matando. ¿QUIÉN ES? ¿DE DÓNDE HA SALIDO? ¿ADÓNDE VAN? Por Dios, acaba con mis dudas pronto, querida Yaiza. Admiro cómo vas mejorando día a día, a pasos de gigante, y que siendo tan joven escribas mejor que muchos autores profesionales.
    Te lo digo muy sinceramente.

    Te amenaza con la silla eléctrica como no escribas la cuarta parte pronto,

    Daw

    ResponderEliminar
  10. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  11. ¡Hola, Yaiza!
    Hermosa tercera parte. Lo describes todo tan detallado que puedo imaginarme casi a la perfección cada uno de los movimientos de los personajes. Es increíble lo bien que escribes, lo digo en serio, no quisiera resultar pesada ni pelota pero es que es totalmente cierto. En cada parte te vas superando más a ti misma, en cada parte dejas siempre ese gusanillo, ese hambre de seguir leyendo más y ver cómo continua todo. Me encanta ese mundo de bohemia del chico, ese estado de ausencia mental de a chica al estar con él, ese repentino cambio de paradero. Pero, sobre todo, me ha fascinado el final. Creo que yo también empiezo a sentir una profunda admiración por todo lo que te rodea a ti y a tus palabras. Tengo aún muchas preguntas sin resolver, así que voy en seguida a por la cuarta parte. Seguro que es aún más emocionante y bella.

    Un abrazo ;P

    ResponderEliminar